martes, 29 de abril de 2008

Esencia




Me sujetas las manos no solo para que no pueda moverme, también para que no pueda tocar mi clitoris. Quieres que me corra así, salvaje y primitiva.

El dolor inicial se convierte súbitamente en placer, en menos de un segundo. Soy yo la que se mueve hacia ti, son mis caderas las que marcan el ritmo mientras tú disfrutas quieto del placer que te ofrezco. Forcejeo para intentar soltarme la mano, pero no me dejas, al contrario, apretas más fuerte todavía, casi hasta me haces daño.

En señal de protesta mi cuerpo deja de moverse. No te importa lo más mínimo, mas bien al contrario así impones tu ritmo propio. Frenéticas embestidas, salvajes que consigan, sorprendéntemente, que me derrame sin necesidad de rozar mi clítoris.

Sales de mi justo antes de correrte, y te desprendes sobre mí, a la vez que gritas y te desplomas contra mi espalda, mezclando así tu sudor, el mío y tu esencia...

5 comentarios:

zangolotino dijo...

Te vas a quedar sin fuerzas,,,o tomas muchas vitaminas?
Imagino que nada de esto se basará en hechos reales??

Vagamundos dijo...

Hay algo más real que un sueño... haya o no sucedido?

NieblA dijo...

Gracias vagamundos por tu respuesta :D.
No, no todo son sueños... pero y qué si lo fueran??

Anónimo dijo...

Un sueño, una fantasia, un deseo........que mas da si todo es por el puro placer de gozar.

Aldicur.

PD: Gracias por tus palabras.

Anónimo dijo...

el sueño es hacertelo