sábado, 11 de septiembre de 2010

SEXO





Salimos el jueves, se nota que acaba el verano, bueno, para mí empieza, la gente vuelve cargada, caliente, supongo que será el acúmulo del sol.
Había mucha gente, el término "mucha gente" es bastante relativo y más después de haber visto el barro madrileño lo de aquí siempre es menos, que no poca cosa.
Reconozco, y no sé muy bien por qué, que estaba tímida, casi cohibida, no quería ni que me dejara sola para irse al baño. Me dió corte, hacía mucho que no me pasaba, se supone que tiene que ser alrevés ¿no?
Que cuanto más vaya menos corte me dará, pero el jueves estaba muy cortada, desentrenada, agosto ha sido muy largo y más aún asexual.
Lo mejor no fue el polvo, no fue el que me metieran una polla, cosa que hacía poco ya había hecho otro.
Fue el pre, lo de antes, el rato de la pista de baile, el que me susurra un desconocido que le pongo cachondo, el que se me refrotaran los dos, uno por cada lado de mi cuerpo, el jugar con las dos pollas, una en cada una de mis manos, el respirarlos a los dos, el que me agarraran desde atrás, entregando al maestro.
Todo eso fue lo mejor.
No recuerdo como se llamaba, algo con D creo, estoy segura que si lo viera por la calle no lo reconocería, y la verdad es que me da lo mismo. El sexo es sexo, nada más, en tríos, parejas, cuartetos, orgías me da igual. El sexo es sexo, el sexo no complica las cosas, por lo menos para mi no. Yo quiero, él o ellos quieren y ya está descargo adrenalina, endorfinas y un montón de hormonas que ya ni recuerdo, todos contentos. Lo que lo complica es lo demás, lo jodido es todo lo demás.
Y yo no me canso de follar, cómo podría cansarme, pero me falta .....algo, ese algo.
Y aún así no me quejo, tengo la suerte de tener al maestro, entre otras personas, en mi vida, casi nadie tiene esa suerte.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Afortunada eres desde luego, nada como un buen guía para manejarse en lo más profundo de estos mundos... Aunque, como bien apuntas, "estos barros" se quedan muy pequeños y a veces indiscretos al lado de otros. Desplazarse cuesta un poco pero los encuentros y fusiones valen la pena. Sigue así.