viernes, 16 de octubre de 2009

Caso 576




Caso 576


La paciente refiere un comportamiento reiterativo y repetitivo el cual insiste en seguir por mucho que su más cercano círculo le ruegue que no continúe con eso.
Pone como excusa, bastante fatua he de añadir, la excepcionalidad de las relaciones sexuales que el agente tóxico (más conocido como el rubio) le provoca, olvidando plenamente que hace semanas de su último encuentro erótico-festivo, el cual ella sigue relatando con la vehemencia y la pasión que la caracteriza. El recuerdo de dichos encuentros provoca ciertos síntomas, no tan negativos como los demás, en la paciente a tratar: endurecimiento del pecho, aumento de secreciones en distintas partes de su cuerpo y una mirada lejana como perdida casi asemejable a la catatonia.

Además de dichos signos, la paciente refiere llanto incontrolado, palpitaciones, sensación de “estar blandita”, e involución a la cómoda forma de crisálida en la que nadie la puede dañar o mejor, si alguien la daña, ni si quiera se entera.
En el momento del ingreso se inicia tratamiento con quedadas de amigas en las que el tema central es “ponerlo a parir” desde la total subjetividad de la parcialidad de la amistad y desde la total objetividad explicándole y haciendo ver a la paciente que el susodicho objeto tóxico no es más que un despojo social. En un segundo intento este equipo organizamos una cita con su amante-amigo-futurotíodesushijos quien repite y reitera la mismas ideas que este equipo y que sus amigas intentando darle también ciertas soluciones prácticas.
Se decide, en consenso con la paciente y por mediación directa de otro de los amigos íntimos, borrar el número del teléfono móvil e impedir todo tipo de citas con él, a no ser que sea sólo y exclusivamente para realizar el coito salvaje sin ningún tipo de extra sentimental e impidiendo rotundamente dormir con el objeto tóxico. Entendemos que el tratamiento debe de ser de por vida y así se lo hacemos entender a la paciente, no sólo con este objeto tóxico en concreto sino también en el caso supuesto de encontrarse en breves o en un futuro con otro objeto tóxico similar o semejante al actual.

El equipo decide no darle el alta de momento a la paciente y continuar el tratamiento de forma ambulatorio, queda pendiente citarse dentro de dos meses en el servicio que corresponda.


Firmado:
Doctor Tiempo

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2 comentarios:

Dr.Mikel dijo...

Pues ya siento discrepar con mi colega Dr Tiempo, pero dados los antecedentes de la paciente, la sintomatología previa, y la evolución del problema de intoxicación, no considero adecuado ningún tipo de contacto con tal sustancia nociva, ni tan siquiera mediante un polvo pronto sin preludios, salvaje y sin entretenimientos post coitales.
Cualquier mínimo contacto con la sustancia dañina orgánica puede propiciar una respuesta exagerada del sistema inmune como si se tratase de una alérgeno que puede proporcinarle diversas reacciones como eczema, urticaria, o dermatitis de contacto.
Otra complicación, en este caso más severa seria el choque anafiláctico reacción que puede afectar al cuerpo entero. La anafilaxis puede ocurrir si la persona ha sido expuesta reiteradamente a la sustancia que le causa el problema. La reacción puede ocasionar problemas respiratorios, pérdida de la conciencia e incluso la muerte.

NieblA dijo...

La paciente estará enternamente agredecida por su segunda opinión Dr Mikel, pero como bien sabe, la paciente es enfermera y conoce perfectamente los signos y síntomas del Shock Anafiláctico, cosa que evitará de por vida borrando de su existencia al objeto tóxico.
Gracias otra vez Dr.