martes, 9 de diciembre de 2008

Re-conciliación re-al




El Maestro de Ceremonias está triste, deprimido incluso, así que yo ayudada de mis manos he urdido un plan de reconciliación. Y parece que ésta se acerca. Vuelvo a sentir esa tensión sexual que me decía que existía y que yo hacía meses que no volvía a palpar.
Sé qué es lo que tengo que hacer, soy consciente de que esto solamente debe de ser un juego, pero vivo ciertos momentos que son visiones perfectas de todo lo que podríamos ser.
La reconciliación se palpa, se huele, me ha cambiado el olor en estos meses hasta él me lo ha dicho. Cada idea, cada cita, cada juego es más morboso, pervertido y depravado que el anterior. Por fin voy a tener para escribir. Agradecidos todos y yo la primera.

No hay comentarios: